En un mundo cada vez más consciente del impacto ambiental, las empresas de logística y transporte juegan un papel crucial en la lucha contra el cambio climático. Según un informe de The Lancet Planetary Health, en 2019, la contaminación fue responsable de aproximadamente 9 millones de muertes prematuras. Por su parte, datos del MITECO resaltan que el transporte por carretera de mercancías es el mayor contribuyente a esta contaminación en España, pues representa más del 95% de la movilidad total a nivel nacional. Así pues, la implementación de estrategias de innovación para reducir las emisiones se ha convertido en una prioridad ineludible para el sector.
Es por esto por lo que, de cara al Día Internacional contra el Cambio Climático el 24 de octubre, Lodisna, empresa navarra de transporte y logística, muestra tres formas en que las empresas españolas de este sector pueden contribuir al bienestar del planeta al mismo tiempo que representan oportunidades significativas para mejorar la eficiencia operativa y la rentabilidad a largo plazo.
Ser punteros en la adopción de nuevas tecnologías
La adopción de tecnologías limpias y eficientes es esencial para reducir las emisiones en el sector de la logística y el transporte. Esto incluye la transición a vehículos eléctricos (EV) o híbridos que utilicen energías limpias como fuente de propulsión o la incorporación de biocombustibles de segunda generación como el HVO100, los cuales pueden reducir drásticamente las emisiones de CO2 y otros contaminantes locales. Por otro lado, existe la posibilidad de explorar alternativas como el hidrógeno, que se perfila como la solución de futuro, pero que puede impulsarse a través de proyectos colaborativos de investigación y desarrollo. Además, existen pequeñas soluciones que contribuyen a la descarbonización como el uso de materiales reciclables en las lonas de los camiones o neumáticos especiales que evitan el rozamiento durante el tránsito para consumir menos combustible.
La búsqueda continua de la eficiencia operativa
La implementación de sistemas de gestión de flotas inteligentes y la optimización de rutas a través de herramientas avanzadas pueden desempeñar un papel crucial al eliminar kilómetros en vacío, reducir el consumo de combustible y por lo tanto las emisiones asociadas. Consolidar las cargas al agrupar envíos de diferentes clientes en un solo vehículo para mejorar la productividad y así disminuir las emisiones por unidad de carga. Reducir el consumo energético de las instalaciones como almacenes y oficinas mediante la adopción de prácticas responsables, las cuales pueden ir desde el simple uso consciente de impresiones hasta la sustitución de equipos antiguos por unos con mejor eficiencia energética. Asimismo, implementar programas de gestión de residuos y reciclaje puede ayudar a reducir el impacto ambiental de las operaciones diarias.
Colaborar con asociaciones estratégicas
Fomentar la colaboración entre las empresas del sector, las instituciones gubernamentales y los centros de investigación es fundamental para maximizar el impacto positivo en la reducción de emisiones. La creación de ecosistemas de colaboración puede facilitar el intercambio de conocimientos, tecnologías y mejores prácticas que contribuyan al bienestar local y a combatir el cambio climático. Este tipo de asociaciones tienen el potencial de crecer no solo a nivel local, sino que pueden impulsarse en todo el país.
“Nos encontramos en un momento de transformación del sector en el que la innovación, la tecnología y el cuidado del medio ambiente están jugando un papel central en el sector. Invertir en estos aspectos tan importantes no solo es rentable, sino que es una necesidad. En Lodisna estamos trabajando en un paquete de digitalización que nos va a permitir gobernar nuestra flota de una manera prácticamente autónoma. Este sistema nos va ayudar a tomar mejores decisiones para maximizar la productividad de la flota, reducir los kilómetros en vacío y por tanto las emisiones”, comenta Javier Avello, director de Innovación de Lodisna. “Por otro lado, los estilos de conducción influyen mucho en los consumos y por tanto en el nivel de emisiones. Procuramos que nuestros conductores conozcan las herramientas que tienen a su alcance y las pongan en práctica, como el uso de control de crucero, la reducción de los ralentís y la correcta distribución de la carga”, concluye.
Lodisna es una empresa que apuesta por acciones que impulsan la sostenibilidad en el sector, tales como la monitorización de los consumos de la flota, las oficinas o las naves, e introduce acciones para reducir las emisiones producidas. Además, cuenta con certificaciones como la Gestión de la Seguridad Vial ISO 39001, Safety & Quality Assessment for Sustainability SQAS. Por otro lado, cuenta con camiones eléctricos en su flota propia con el fin de responder a las necesidades de sus clientes en materia de descarbonización y así reforzar su compromiso de apoyo a la transición energética en el sector logístico. Lodisna cuenta con un servicio de última milla en el centro de Pamplona, con el cual logran reducir en un 30% los tiempos de entrega.